La pandemia del coronavirus ha generado una recesión económica que ha afectado en mayor medida a hogares de ingresos medios y bajos, pues sus ingresos dependen más de sectores vulnerables a la crisis. Esta nota analiza los efectos sobre pobreza y desigualdad que podría tener la pérdida directa de ingresos laborales ocasionada por la emergencia. Se calculan los efectos de un escenario plausible en el que se ven afectados trabajadores informales y formales, en los sectores más vulnerables a las prácticas de distanciamiento y medidas de confinamiento, haciendo énfasis en los empleos más frágiles. El resultado principal es que se podría producir un efecto en pobreza y desigualdad equivalente a retroceder a los inicios del siglo XXI.
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Efectos en pobreza y desigualdad del Covid-19 en Colombia: un retroceso de dos décadas
Nota Macroeconómica No.20, Observatorio de Coyuntura, Facultad de Economía-CEDE.
Las transferencias a hogares vulnerables que se están realizando para aliviar los efectos de la crisis generada por la pandemia podrían transformarse en una política permanente. Esta nota discute el ingreso básico garantizado (IBG) como mecanismo para implementar dichas transferencias. El IBG asegura a personas con ingresos muy bajos o nulos un mínimo vital mensual para satisfacer sus necesidades básicas. Este mecanismo podría unificar las transferencias ya existentes, serviría como un seguro de desempleo, reemplazaría (parcialmente) el salario mínimo mensual, y garantizaría una pensión mínima. Esta unificación de programas aumentaría también el empleo formal al disminuir la carga de las empresas. Todos estos beneficios podrían lograrse con un costo razonable que bien podría pagarse con las ganancias en formalidad.
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Ingreso básico garantizado (IBG): ¿es el momento ideal de implementarlo?
Nota Macroeconómica No.20, Grupo de Investigación en Macroeconomía, Facultad de Economía-CEDE.
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