La epidemia de opioides y el apoyo de la clase trabajadora al Partido Republicano
9 de septiembre de 2025
Carolina Arteaga, Assistant Professor, University of Toronto.
Doctorado: UCLA.
Pregrado y maestría: Universidad de los Andes.Página web del autor: www.carolinaarteaga.com
Sobre la iniciativa voces: https://economia.uniandes.edu.co/voces
Tras las elecciones de 2024 en Estados Unidos, una pregunta común fue por qué la clase trabajadora apoyó a Donald Trump y al Partido Republicano. Analistas políticos ofrecieron explicaciones como el énfasis en la inflación, la alienación cultural o el rechazo a las élites y al establecimiento. Sin embargo, después de estudiar por años las consecuencias económicas y políticas de la crisis de opioides, encuentro que la profunda y trágica huella que dejó esta epidemia desempeñó un papel central en este giro político.
En un estudio reciente, coautorado con Victoria Barone, exploramos cómo la crisis de opioides transformó no solo la salud y la economía en Estados Unidos, sino también su mapa político. Basándonos en documentos internos recientemente desclasificados del litigio contra Purdue Pharma —la farmacéutica responsable de OxyContin—, rastreamos cómo la estrategia de marketing corporativa iniciada hace casi treinta años contribuyó a una crisis de adicción que, con el tiempo, modificó el comportamiento electoral en las comunidades más afectadas.
El inicio de la crisis de los opioides se remonta a mediados de los años noventa, cuando Purdue Pharma lanzó OxyContin, un narcótico con alto riesgo de adicción originalmente formulado para tratar el dolor terminal asociado al cáncer. La estrategia de marketing de Purdue Pharma no fue aleatoria. Inicialmente, la empresa dirigió su promoción a zonas con altas tasas de mortalidad por cáncer, posicionando OxyContin como un analgésico revolucionario para pacientes oncológicos. La razón de esto fue que OxyContin nació para reemplazar MSContin, otra droga también fabricada por Purdue Pharma, que era líder en el tratamiento del dolor por cáncer pero que iba a enfrentar competencia de genéricos en 1996. El objetivo era entonces cambiar a estos pacientes con dolor terminal de una droga a otra. Sin embargo, estas mismas comunidades pronto se convirtieron en epicentros del consumo generalizado de opioides, a medida que Purdue Pharma expandía su discurso hacia el tratamiento del dolor moderado y crónico, no relacionado con el cáncer, minimizando deliberadamente los riesgos de adicción de una droga químicamente muy similar a la heroína.
Los médicos y pacientes que ya estaban familiarizados con los opioides para tratar el dolor oncológico fueron los primeros en normalizar su uso en otros contextos. Como resultado, las comunidades que inicialmente estuvieron en el centro de la campaña promocional de Purdue Pharma —aquellas con mayor mortalidad por cáncer en 1996— estuvieron desproporcionadamente expuestas a OxyContin y a narcóticos de otras farmacéuticas como Janssen, TEVA, entre otras, que emularon la estrategia de marketing de Purdue Pharma.
Las consecuencias de esta exposición fueron devastadoras. Encontramos que, para 2012, estas zonas recetaban opioides a un ritmo un 50 % mayor que otras comparables (Figura 1). Las muertes por sobredosis eran el doble (Figura 2) y la crisis afectaba principalmente a adultos en edad laboral, especialmente a menores de 55 años. Estas mismas comunidades experimentaron un aumento sostenido en las solicitudes de programas de discapacidad y de asistencia alimentaria, indicadores de un deterioro económico persistente.
Figura 1: Efectos de la estrategia de marketing dirigida al cáncer sobre la distribución de opioides
Figura 2: Efectos de la estrategia de marketing dirigida al cáncer en la mortalidad por consumo de opioides
Estos hallazgos nos llevaron a explorar las consecuencias políticas. Y allí vimos un patrón llamativo: a partir de mediados de los 2000, las comunidades con mayor exposición a opioides comenzaron a votar más por el Partido Republicano. Esto ocurrió en todos los niveles: elecciones a la Cámara de Representantes, a gobernaciones y presidenciales. Para 2022, un aumento de una desviación estándar en la exposición a opioides correspondía a un aumento de 4.5 puntos porcentuales en el voto republicano a la Cámara (Figura 3).
Figura 3: Efectos de la epidemia de opioides sobre la proporción de votos republicanos en elecciones presidenciales
¿Por qué resonó el mensaje del Partido Republicano?
En un primer momento, no era evidente que la epidemia de opioides favoreciera electoralmente al Partido Republicano. Históricamente ha sido el Partido Demócrata el que ha abogado por el fortalecimiento de los sistemas de salud, discapacidad y pobreza, así como por una mayor inversión en tratamiento contra las adicciones.
Sin embargo, el desarrollo de la epidemia de opioides coincidió con un período en el que el Partido Republicano y los medios conservadores, en particular Fox News, enfatizaron una narrativa centrada en las dificultades económicas que enfrentaba la clase trabajadora en Estados Unidos (Peck, 2019). Al apropiarse de este tema, el Partido Republicano buscó posicionarse como el defensor de la “forgotten America” y la “America left behind” (Gest, 2016; Hochschild, 2018; Peck, 2019). En las comunidades más afectadas por la crisis de opioides, tanto en términos de salud como económicos, este mensaje resonó particularmente bien, puesto que hablaba justamente sobre las dificultades que estaban viviendo. En línea con esta idea, calculamos efectos de tratamiento a nivel estatal y encontramos que las áreas con los mayores aumentos estimados en mortalidad, participación en el programa de pobreza y discapacidad debido a la epidemia son también aquellas para las que estimamos efectos mayores en la proporción de votos republicanos en elecciones posteriores.
Para estudiar el rol de los medios, construimos una base de datos usando archivos de periódicos locales y cadenas nacionales de televisión. Encontramos que los medios comenzaron a informar sobre la crisis desde sus inicios, pero existieron diferencias importantes entre medios conservadores y liberales. Fox News, por ejemplo, cubrió la epidemia con más frecuencia que sus contrapartes liberales como CNN y MSNBC. Este patrón también lo observamos en los periódicos locales. En particular, los medios con inclinación conservadora cubrieron la epidemia de manera más extensa que los medios liberales, y su cobertura reflejaba estrechamente las tasas locales de mortalidad por opioides. En contraste, la cobertura de los medios liberales no mostró relación con la exposición local.
Para estudiar el contenido de esta cobertura, recopilamos los titulares de una submuestra aleatoria de estos artículos escritos entre 2000 y 2018 (9,044 de un total de 118,210). Encontramos que el contenido también varió según la ideología: los medios conservadores tendían más a resaltar temas como las dificultades económicas, el crimen y el tráfico ilegal de drogas—temas en los que el Partido Republicano tiene una ventaja política.
Vale la pena notar que el apoyo al Partido Republicano no implica que este ofreciera mejores soluciones a la crisis de los opioides. Sin embargo, encontramos evidencia de que en los lugares más afectados por la crisis existía un alineamiento con las políticas del Partido Republicano, como un mayor apoyo a políticas punitivas (por ejemplo, el aumento de la presencia policial) y menor respaldo a enfoques de salud pública como la legalización del cannabis, usualmente promovidos por el Partido Demócrata.
Muchas de las comunidades que hoy apoyan al Partido Republicano no lo hicieron históricamente. Durante décadas fueron bastiones del Partido Demócrata: ciudades industriales, zonas rurales con fuerte presencia sindical y comunidades caracterizadas por su sentido de solidaridad colectiva. Sin embargo, frente al impacto devastador de la epidemia de opioides, estas comunidades percibieron una ausencia de respuesta por parte de los actores políticos tradicionales. Esta falta de atención y acción contribuyó a reconfigurar sus posiciones políticas y a fortalecer su alineamiento con una narrativa que, aunque no necesariamente ofrecía mejores soluciones, sí reconocía su realidad.