El sistema de salud colombiano actual tiene dos grandes logros comparado con los de otros países: cobertura casi universal, y gastos de bolsillo relativamente bajos para los usuarios que se enferman. Sin embargo, mantiene problemas de acceso particularmente marcados en las zonas rurales, y muestra pocos incentivos para que el servicio sea de alta calidad. Público o privado, el sistema de salud seguirá con problemas de acceso si no existen actores cuyo papel sea el que hoy cumplen las EPS: racionalizar el gasto en salud. El Estado podría llegar a cumplir algunas de las funciones que las EPS no suplen con suficiencia: acceso en zonas rurales y prevención efectiva de algunas morbilidades. Sin embargo, esto no será posible en ausencia de un sistema de información robusto y unificado que hoy no existe.
Reforma a la salud: los pros y los contra
Autores:
David Bardey y Álvaro Riascos.