La alta inflación, así como la subida de las tasas de interés, amenazan la economía de los colombianos.

(Reciente decisión del Banrep, ¿implica moderación de las alzas?). 

Y es que con créditos más caros, el ritmo de consumo de los hogares tiende a frenarse, efecto que ya se observa desde el año pasado con el aumento de precios y una menor dinámica de compras.

Este impacto no solo se registra en las tasas de créditos de consumo sino también en otros tipos de crédito como los préstamos hipotecarios.

En un Live con Portafolio, el profesor de la Universidad de los Andes, Marc Hofstetter, experto en política monetaria, manifestó que con altas tasas de interés como las que se registran ahora, lo más conveniente es no tomar ningún crédito a menos de que sea estrictamente necesario hacerlo.

(Ganadores y perdedores con la inflación de 13,12 % de 2022). 

“Si no es imprescindible tomar un crédito en este instante un consumidor no debería considerarlo. ¿Qué quiere decir imprescindible? Eso es algo que debe definir cada hogar en sus discusiones, en sus cálculos y en sus necesidades, pero es ciertamente un mal momento para tener créditos y más aún si son con tarjetas en los cuales las tasas de interés están en niveles muy altos”, señaló el experto.

Agregó que en caso de necesitarlo, se recomienda hacer muy bien las cuentas para establecer si sí se puede pagar o no en un futuro, entendiendo que el traslado de las tasas tienen un efecto de rezago.

PORTAFOLIO